- Exposición: Mágicas, Místicas y Medicinales
- Cáñamo – Los Vaqueros Más Resistentes
Cannabis sativa L.
Asi el cañamo salvage como el domestico es muy conocido y vulgar por´q no solamente se hazen de su corteza torzidas cuerdas, pero tabien se texen las telas bastas y gruessas della. Su simiente calienta, y desseca có tanto vigor y eficacia q resuelve la virtud genital. De mas desto digierese dificilmente, da pesadumbre al estomago, emborracha, da dolor de cabeça y conviertese en malos humores. Los quales inconvenientes, y daños se le deven perdonar al cañamo pues consta que es instrumento de la justicia para purgar y extirpar los perniciosos hombres de la Republica. Es tambien de notar, que aunque la simiente del cañamo agota y consume la esperma, todavia las gallinas que se mantienen della, ponen muchos y muy excelentes huevos. Derramado por tierra el cozimiento del cañamo, atrahe azia si todas las lombrizes que en el contorno se hallan.
Dioscorides, P. 1651. A cerca de la materia medicinal, y de los venenos mortiferos (Traducido, ilustrado y anotado por el Dr. A. Laguna)
El cáñamo es una planta herbácea, de rápido crecimiento, que puede alcanzar hasta cuatro metros de altura, es dioica, es decir que hay plantas que portan flores femeninas y otras masculinas. Nativa de Asia central, es la única especie del género Cannabis, incluido en la familia Cannabaceae y se encuentra silvestre o cultivada, con un gran número de variedades destinadas a diferentes usos.
Numerosas evidencias y restos arqueobotánicos demuestran el uso del cáñamo desde la antigüedad. La referencia escrita más antigua que se conoce se encuentra en el Pen Tsao, un libro de la farmacopea china del año 2727 a.C., en donde se describen sus propiedades medicinales. Aunque hay evidencias que sustentan que el cáñamo era cultivado en China mucho antes, en el 4500 a.C., fundamentalmente para la fabricación de cuerdas, textiles y papel. Se cree que su domesticación y cultivo comenzó en zonas templadas de Asia, desde donde se expandió a otras áreas del continente asiático, la cuenca mediterránea y Europa.En el siglo XV y XVI los árabes la introdujeron en África, donde se extendió con rapidez; la planta seca, mezclada con bebidas o masticada, se les daba a las mujeres durante el parto y a los niños durante el destete. En América entró de la mano de los exploradores españoles en 1545, quienes iniciaron su cultivo en Chile.
Uno de los primeros países que utilizó el cáñamo por sus propiedades alucinógenas fue India, siendo el bhang, una bebida hecha con sus hojas, leche, azúcar y especias, la forma más común de consumir cannabis en este país. En Europa y el resto del mundo el cannabis fumado es el método de consumo más popular, tanto en forma de marihuana (preparado de hojas y flores secas) o de hachís (preparado de resina). Los pelos glandulares que cubren las hojas superiores y las brácteas de las plantas hembra son particularmente ricos en una resina que contiene varias sustancias psicoactivas, entre las que destaca el THC (tetrahidrocannabinol).
Estudios médicos han probado su eficacia en medicina para paliar el dolor, los efectos del asma, para tratar la hipertensión en los ojos de pacientes con glaucoma, así como para reducir las náuseas en pacientes sometidos a quimio y radioterapia. Sin embargo, el abuso en el consumo de esta especie ha sido también relacionado con la aparición de diversos problemas físicos y psíquicos.
En la actualidad se cultiva, además, por sus semillas, dedicadas a la extracción de aceite y alimento animal y por las fibras, obtenidas de su tallo y utilizadas en la industria textil y en la construcción. El uso textil de las fibras de cáñamo se remonta a la prehistoria, habiendo sido ampliamente cultivada en Europa durante siglos. Las fibras, más fuertes y duraderas que las del algodón, fueron tradicionalmente utilizadas para la fabricación de cuerdas, tejidos para la navegación, sacos, trapos, así como para la confección de ropa de trabajo. La historia de que los primeros pantalones vaqueros fabricados por Levi Strauss estaban hechos con tejido de cáñamo, resultó ser un mito urbano, no obstante, en las últimas décadas el interés por este tejido ha crecido y es común su uso en el mundo de la moda. Las semillas son muy nutritivas y apreciadas para alimentación animal, de ellas se extrae un aceite para lámparas que es además empleado en la fabricación de barnices y pinturas.