- Exposición: Louise Weiss: una mujer comprometida con Europa
- Los primeros años: guerra y paz
Louise Weiss nació el 25 de enero de 1893 en Arras (en la región francesa del Paso de Calais). Era la mayor de seis hermanos de una familia de clase media alta de origen alsaciano con valores republicanos patrióticos y laicos. Su padre era un renombrado ingeniero de minas. Su madre, también alsaciana, procedía de una familia judía con raíces en Europa Central, una historia familiar que llevó a Weiss a tomar conciencia, desde muy temprana edad, de los peligros de la historia y de las difíciles relaciones entre Francia y Alemania.
Pasó su juventud en París, donde recibió una estricta educación en las mejores escuelas del país. A pesar de que su padre se opuso, decidió aventurarse en el mundo académico, en el que cosechó grandes éxitos: se licenció en la Universidad de Oxford y aprobó una prestigiosa oposición en el ámbito de las letras (agrégation de lettres) a la edad de veintiún años. Ahora estaba cualificada para ser profesora, pero su futuro tomó un rumbo diferente al de las aulas. Recién graduada en 1914, la vida cambió para siempre, tanto para ella como para toda Europa.
La hecatombe vivida en los campos de batalla de la Primera Guerra Mundial y el sufrimiento de una generación sacrificada marcarían a Weiss de por vida. Rechazó la lucrativa oportunidad de dedicarse profesionalmente a la enseñanza y en su lugar puso en pie un dispensario para tratar a los soldados heridos en combate y, posteriormente, un centro para las víctimas del norte de Francia.
Pronto empezó, sin embargo, a buscar otras maneras de dar salida a sus talentos. Atraída por el debate y el intercambio de ideas, se convirtió en periodista y publicó sus primeros artículos en periódicos parisinos.